Emociones y videojuegos
Publicado: 12/08/16 19:30
¿Te ayudan las emociones a la hora de jugar? ¿O todo lo contrario?
Ejemplos:
- Llego con poca energía a un jefe que te suele sopapear fácil. Como cada barrita de energía cuenta, me pongo lo más concentrado posible. Y en muchos enfrentamientos con poca energía, me va mejor que cuando tengo la barra completa
- Llego con mucha energía al mismo jefe. Estoy más tranca, puedo darme el gusto de bancarme algunos sopapos. Pero eso hace que baje la guardia, el jefe me gana. Es como la fábula de la liebre y la tortuga, una pecheada.
- Vengo de perder seguido con un jefe, la bronca toma control de mis acciones. Y no siempre toma las mejores decisiones. Cuando estoy jugando con bronca es cuando tengo que dejar de jugar porque voy a seguir perdiendo, lo que me va a dar más bronca!
Cuenten cómo les va a ustedes:
hay pecheo?
hay bronca? Juegan mejor o peor con bronca?
Se concentran naturalmente, o sólo sale en casos extremos?
Yo no puedo ser robot. Por más que juegue mucho un juego, tarde o temprano alguna emoción se mete y cambia mi manera de jugar.




PD: volvió messi a la selesionnnn! 
Ejemplos:
- Llego con poca energía a un jefe que te suele sopapear fácil. Como cada barrita de energía cuenta, me pongo lo más concentrado posible. Y en muchos enfrentamientos con poca energía, me va mejor que cuando tengo la barra completa
- Llego con mucha energía al mismo jefe. Estoy más tranca, puedo darme el gusto de bancarme algunos sopapos. Pero eso hace que baje la guardia, el jefe me gana. Es como la fábula de la liebre y la tortuga, una pecheada.
- Vengo de perder seguido con un jefe, la bronca toma control de mis acciones. Y no siempre toma las mejores decisiones. Cuando estoy jugando con bronca es cuando tengo que dejar de jugar porque voy a seguir perdiendo, lo que me va a dar más bronca!
Cuenten cómo les va a ustedes:
hay pecheo?
hay bronca? Juegan mejor o peor con bronca?
Se concentran naturalmente, o sólo sale en casos extremos?
Yo no puedo ser robot. Por más que juegue mucho un juego, tarde o temprano alguna emoción se mete y cambia mi manera de jugar.





