Hoy le toca el turno al glorioso:Switch! (Sega CD)
Este juego de Sega CD, producido por Sega en Japón allá por 1993 y llevado a los EE.UU. por Data East en el '94, podría ser descripto como una aventura gráfica minimalista de humor slapstick y vulgar. Intrigados? Quién no! Si alguna vez vieron algo de los "Monty Python" o una película de Mel Brooks, pero de las malas, saben más o menos como viene la mano.
Ya desde la introducción el juego nos pone en el humor adecuado: unos videos muy sencillos, de animación bien caricaturesca, acompañados por un excelente tema de jazz dixieland (bien movido!).
La historia es tan mínima como el juego en sí: en un futuro indeterminado pero no muy lejano, todas las máquinas del mundo están, de algún modo, conectadas a una titánica red de computadoras global. Cuando entra un virus en computadora principal, todos los aparatos del mundo entero comienzan a funcionar mal! Se diseña, para eliminar el virus, un programa con el nombre en código "Panic!" (el nombre original del juego en Japón). Por algún extraño motivo, nuestro protagonista (un nene acompañado de su perro) es metido a la fuerza en la red mientras intentaba jugar con su Sega CD y debe eliminar el virus.
Acá empieza la experiencia Switch! El juego consiste de una sucesión de pantallas estáticas, o con animación mínima, en la cual nos encontramos en algún lugar bizarro y con una botonera a mano, con una cantidad variable de botones. Controlamos un puntero, y dependiendo del botón que apretemos, puede ocurrir una de 4 cosas:
- Un gag visual, bien absurdo y caricaturesco. Hay de todo, pero abundan, por ejemplo, chistes de vómitos, pedos, y cosas grandes y pesadas que caen sobre el protagonista (una cabeza Moai, un pie como el de los Monty Python, un dedo de Dios, etc)
- Una breve cutscene con diálogos humorísticos. En general, un personaje completamente descolgado haciendo un comentario idem, a veces relacionado con la pantalla en la que estamos y a veces no (uno de los que más me gustan es un bebé con cabeza de Thomas Alba Edison diciendo incoherencias al lado de un bebé con cabeza de lamparita que titila!
).- Que nos teletransportemos a otra pantalla del juego.
- Otra cutscene en la cual el virus destruye alguna maravilla del mundo o monumento importante, y se nos indica cuántos monumentos/maravillas quedan en pie
Obviamente, tendríamos que tratar de evitar esta última opción dentro de lo posible, ya que si se destruyen los 30 hallmarks que hay en el juego, perdemos. El problema es que no es tan fácil, ya que no hay forma de saber de antemano qué ocurrirá cuando apretemos un botón cualquiera, a menos claro que ya lo hayamos apretado. Sí, varias veces a lo largo del juego volveremos a visitar pantallas previas, ya que si bien las teletransportaciones son definidas (es decir un botón determinado de una pantalla determinada siempre nos lleva al mismo sitio X) la cantidad de pantallas y botones es tan grande que deberemos, como mínimo, tomar nota de los lugares por los que pasamos y los botones que activamos si queremos tener chance de completar el juego. Eso, o recurrir a una poco deportiva guía en internet...
En cualquier momento del juego (salvo durante las cutscenes o gags) podemos apretar start para ver una suerte de mapa de las pantallas del juego, que nos marca cuáles ya hemos visitado, y nos permite grabar el juego en la memoria del Sega CD:
Gráficos: si bien son simples, y las animaciones no demasiado buenas, son adecuadamente caricaturescos, graciosos y coloridos. Kudos to them!
Música: aún no he podido encontrar dos pantallas diferentes con la misma música de fondo, así que se la podría describir como "variada". Cada tema se corresponde con lo que ocurre en pantalla, así que a "variada" súmenle "adecuada", pero poco más.
Sonido: uno de los puntos fuertes del juego. La enorme mayoría de los efectos de sonido del juego fueron hechos por dos programadores... usando nada más que sus bocas! Préstenles atención, porque algunos son gloriosos.
Jugabilidad: extremadamente simple, no hay nada complicado que aprender para poder jugar.
Adicción: no muy alta, lamentablemente. Aunque cada tanto podemos pasar un buen rato y llevarnos una grata sorpresa.
Lo malo: como mencioné recién, el juego falla en atrapar. Al rato de jugar, nos aburrimos un poco de ver siempre chistes, salvo la ocasional escena sorpresa. Por eso, el público ideal de este juego queda, en mi opinión, restringido a nenes chicos o a aquellos que disfrutan enormemente del humor visual absurdo. No obstante lo cual, es una buena relajación cada tanto, y una interesante novelty para las reuniones de amigos.
CALIFICACIÓN FINAL: le doy 7 chistes de pedos sobre 10 porque, a pesar de ser disfrutable, no engancha demasiado y su público ideal es bastante acotado. Si alguno lo quiere probar, me manda un PM y lo charlamos.
Muchas gracias, boys!! La verdad que me encanta el apoyo que me dan todos por mis modestas reviews. Me ponen las pilas para escribir más!