Domingo 11/9 a las 18.00hs en Cinema (esquina Cabildo y Juramento) acordaban por MSN jony80s y Queca unos días antes del encuentro que estaba a punto de concretarse.
Llegué temprano y estoy al pedo así que voy a dar unas vueltas hasta que vengas
fue el primer SMS. OK, voy patinando así que no hay drama
fue la respuesta, pronta e inesperada.
A las 18.10hs jony80s se deslizaba (posta, en patines) hacia el punto de encuentro disminuyendo el paso por pura fricción y Queca, que esperaba ahí desde hacía rato con la mirada perdida en su teléfono, espabiló.
18.11 y dos gamers (de la mejor rama: la retro) estrechaban sus manos sabias y curtidas por las batallas contra los invasores del espacio, por meterse en peleas callejeras y kombates mortales y por salvar algún que otro reino lisérgico.
En esta crónica las razones del encuentro no son importantes, sino más bien sus consecuencias... en fin, a mitad del destino X el viaje se interrumpía.
En la altura en que Moldes abraza a Juramento los peregrinos descubren un tesoro, un verdadero cofre de doblones del siglo XXI a la espera de dos piratas duchos que sepan la diferencia entre pirita y oro.
A simple vista se podía apreciar la inclinación tecnológica del monte de basura: CDs, DVDs, parlantes, ratones (los de PC y los biológicos) sin duda era una potencial fuente retro.
18.30hs y los gamers cabeceaban a todos lados mientras analizaban tímidamente el mar de desperdicios en busca de una excusa para sumergirse.
Pasaron cinco minutos hasta que con una naturalidad impensable en un pseudo Rodrigo de Triana jony mascullaba un ¡mira esto! mientras revolea a los pies de Queca una caja:
La confirmación estaba dada: ¿sería ésta la punta del iceberg? La lógica dictaba que quien tenía un joystick también tenía juegos.
Pataleando y pisando entre los restos empezaban a aparecer, a cuenta gotas, diferentes ítems; poco interesantes si se encuentran amansados en una estantería pero el éxtasis de la cacería de material en estado salvaje le daba un valor diferente.
19.00 y con la dignidad hecha a un lado jony80s manipulaba basura con sus pies con la habilidad de un primate. Ya se había conseguido lo que podríamos decir como la primera joya del tesoro:
Queca, un poco más reacio a seguir miraba de reojo subestimando el poder de la pila de basura. Un hallazgo en manos de su compañero de roñas cambiaría su percepción de la situación:
Si está el manual tiene que estar la caja, ¡yo no me voy hasta que no encuentro esa caja! Afirmaba a las 19.15 poseído por una fuerza nórdica proveniente del mismísimo Odín mientras revisaba la basura, ya no con recelo o timidez, ya no con los pies sino con sus manos, mientras esquivaba forros, pañales y jeringas coronaba la expedición en la montaña de basura, ponía la banderita en K2 con una última joya:
19.20 Ya contentos con el saqueo y un poco más llenos de historia y gérmenes los jugadores retomaban su camino dando por finalizada la situación aunque el reflejo de fichar cada bolsa de basura en la vía publica persistiría unas horas más.[/size]